Hace unas semanas publiqué un artículo sobre la emisión de billetes municipales en Benínar, ahora le toca a Berja.
Debido a la escasez de moneda fraccionaria, los ayuntamientos
republicanos decidieron por su cuenta y riesgo la emisión de billetes locales,
avalados por ellos, para fomentar la actividad comercial de sus municipios.
El 19 de julio de 1937 el ayuntamiento de Berja se reúne y acuerdan lo
siguiente:
“A propuesta del alcalde y para sanear momentáneamente la situación
difícil del comercio y de los ciudadanos con la cuestión del cambio de billetes,
se acuerda que el ayuntamiento emita moneda local litografiada para evitar
posibles falsificaciones, la que firmará el Depositario del Consejo Municipal
con su sello y cuya cantidad será la de 50.000 pesetas distribuidas en la
siguiente forma:
-Cinco mil billetes de dos pesetas cada uno, diez mil pesetas.
-Veinte mil billetes de peseta, veinte mil pesetas.
-Veinte mil de cincuenta céntimos, diez mil pesetas.
-Cuarenta mil de veinticinco céntimos, diez mil pesetas.
Que hacen un total de cincuenta mil pesetas, cuya cantidad se lanzará a
la circulación, prohibiendo la de toda clase de tiques comerciales, los que no
podrán funcionar ni tendrán validez a partir de la fecha en la que se ponga en
circulación la moneda de este Consejo, la que siempre se encuentra respaldada
por las fuentes de ingresos municipales y será retirada de la circulación tan
luego que la normalidad y las circunstancias lo aconsejen.
A esta cantidad de moneda local se dará ingreso en caja, como ingreso que
se realiza circunstancialmente y que en su día ha de ser devuelto al canjearse
por moneda del Estado”.
En el reverso de los billetes, siempre en blanco, presenta la numeración
y sello del Consejo Municipal:
La impresión se encargó a la
papelería almeriense Lacoste (situada donde estaba la papelería Avenida, en el
Paseo de Almería número 2). El 19 de enero de 1938 se acuerda el pago a la
imprenta y papelería Viuda de Emilio Lacoste de 50 pesetas por el trabajo.
El 3 de febrero de 1938 se requiere
“por el Secretario del ayuntamiento a los Consejeros y especialmente a los
miembros de la comisión de Hacienda para el pago del préstamo que para el
depósito de los vales emitidos por el Consejo habrá que hacer efectivo en su
día”.
Una vez terminada la guerra y constituido
el nuevo ayuntamiento, el 19 de abril de 1939 se abre la caja municipal y
encuentran 38.081,95 pesetas en vales municipales, rotos e inservibles,
mandados retirar de la circulación y de difícil recuento dado su mal estado.
Si se emitieron 50.000 pesetas en
vales y se recogieron 38.081,95 ptas, quiere decir que quedaron 11.918,05
pesetas en vales sin recoger, que son los que hoy en día aparecen en manos de
coleccionistas.
Saludos.